La Iglesia Católica celebra cada 8 de mayo a María, la madre de Dios, bajo la advocación de la Virgen de Luján o Nuestra Señora de Luján. Se trata de la patrona de Argentina, por lo que su imagen se encuentra en distintas instituciones nacionales.
La historia de la Virgen de Luján refiere a la llegada de la figura de la advocación de la madre de Jesús a las cercanías del río que lleva su nombre, en la zona de Buenos Aires, después de tres días. Su presencia estuvo vinculada entonces al envío que recibió el portugués Antonio Farías de un amigo, que quería venerar a la virgen en la capilla que estaba construyendo en sus tierras.
En ese traslado, los troperos cargaron la carreta para trasladar la imagen de la Virgen María pero los animales se volvieron incapaces de arrastrar la carga. Sin embargo, una vez que se bajó la caja donde trasladaban la figura, los bueyes tomaron su tarea con normalidad.
Quienes fueron testigos de la escena, interpretaron que aquella imagen de la Virgen Inmaculada no quería irse del lugar: la madre de Jesús quería quedarse allí, en ese pueblito junto al río. Acto seguido, la imagen fue trasladada a la casa de uno de los locales, cuya familia la recibió con alegría y devoción.
La noticia corrió por toda la región bonaerense y despertó la piedad de la gente. Así, pronto muchas personas empezaron a acercarse al lugar, primero por curiosidad, luego con devoción, para pedir o agradecer a la Virgen favores y milagros.
Con el correr de los días, se decidió construir una gruta y colocar allí la imagen de la madre de Jesús para que pudiese ser venerada apropiadamente. La ‘Virgen de Luján’ -como se le empezó a llamar- había llegado para quedarse en el corazón del pueblo argentino.
Por qué la Virgen de Luján es protectora de Argentina
El 8 de mayo de 1887, se realizó la coronación canónica de la imagen de la Virgen de Luján. Años después, la gruta sería reemplazada por una basílica erigida en el mismo lugar: el Santuario de la Virgen de Luján.
Hace ya más de una década, en la audiencia general del 8 de mayo de 2013, el papa Francisco recordó de forma especial a la Virgen de Luján, a quien profesa una especial devoción por ser la patrona de Argentina. Aquel día, el papa le encomendó a ella “todas las alegrías y preocupaciones de los argentinos”.
Cuál es la oración para la Virgen de Luján: conocéla acá
Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra. Nuestra Señora de Luján, Patrona de nuestra Patria; hoy alzamos nuestros ojos y nuestros brazos hacia ti Madre de la Esperanza, de los pobres y de los peregrinos, escúchanos…
Hoy te pedimos por Argentina, por nuestro pueblo. Ilumina nuestra patria con el sol de justicia, con la luz de una mañana nueva, que es la luz de Jesús. Enciende el fuego nuevo del amor entre hermanos.
Unidos estamos bajo la celeste y blanca de nuestra bandera, y los colores de tu manto, para contarte que: hoy falta el pan material en muchas, muchas casas, pero también falta el pan de la verdad y la justicia en muchas mentes. Falta el pan del amor entre hermanos y falta el pan de Jesús en los corazones.
Te pedimos madre, que extingas el odio, que ahogues las ambiciones desmedidas, que arranques el ansia febril de solamente los bienes materiales y derrama sobre nuestro suelo, la semilla de la humildad, de la comprensión. Ahoga la mala hierba de la soberbia, que ningún Caín pueda plantar su tienda sobre nuestro suelo, pero tampoco que ningún Abel inocente bañe con su sangre nuestras calles.
Haz madre que comprendamos que somos hermanos, nacidos bajo un mismo cielo, y bajo una misma bandera. Que sufrimos todos juntos las mismas penas y las mismas alegrías. Ilumina nuestra esperanza, alivia nuestra pobreza material y espiritual y que tomados de tu mano digamos más fuerte que nunca: ¡ARGENTINA! ¡ARGENTINA, CANTA Y CAMINA!
Con información de ACI Prensa.-
