La artista de 53 años padecía un cáncer metastático. La noticia fue confirmada por su publicista, Leslie Sloane.
La actriz Shannen Doherty murió a los 53 años tras luchar contra un cáncer metastático. La noticia fue confirmada por su publicista Leslie Sloane a la revista People.
A lo largo de su trayectoria trabajó también como productora y directora. Uno de sus roles más reconocidos fueron en las telenovelas Beverly Hills 90210 y Charmed.
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“El sábado 13 de julio perdió la batalla contra el cáncer después de muchos años de luchar contra la enfermedad”, informó Leslie al medio estadounidense. “La devota hija, hermana, tía y amiga estuvo rodeada de sus seres queridos y de su perro, Bowie. La familia pide privacidad en este momento para poder llorar la pérdida en paz”, se lee también en el comunicado.
La figura de la TV de los 90′ fue actriz, productora y directora. Su trayectoria artística empezó cuando era chica con un debut en Father Murphy. Sus papeles más conocidos fueron: Prue Halliell en Charmed, y Brenda Walsh en la serie Beverly Hills 90210, donde interpretaba a una típica adolescente estadounidense.
A Shannen le habían diagnosticado cáncer de mama por primera vez en 2015. Dos años después, la enfermedad entró en remisión, pero en 2019 volvió con más fuerza. Hace poco más de un año, luego de varios tratamientos, Doherty contó que su cuadro se había agravado.
Qué había dicho Shannen Doherty sobre la enfermedad que padecía
En abril de este año, en uno de los episodios de su podcast, la estrella había asegurado que el cáncer estaba cada vez más avanzado. Incluso, había manifestado que se estaba “preparando para morir”.
En ese momento, Shannen había hablado en Let’s Be Clear, su espacio en la web, sobre lo que le estaba pasando. “Mi prioridad en este momento es mi mamá. Sé que será difícil si yo muero antes que ella”, sostuvo.
Tres meses antes de su partida, la actriz remarcó que había empezado a revisar todas sus pertenencias para donar, vender y regalar, en caso de que le pasara algo. Por eso, viajó a la casa que tenía en Tennessee, al sur de los Estados Unidos, para deshacerse de sus bienes.
La idea de Doherty era retirarse por completo y llevar una vida de granjera, pero la enfermedad que sufría se lo impidió. “Estábamos en Tennessee y estaba empacando en uno de los lugares. Fue realmente difícil y muy emotivo porque, hasta cierto punto, sentí que estaba renunciando a este sueño de construir esta propiedad, construir una casa para mí, otra para mi mamá y luego ampliar el granero”, comentó en ese momento.
En su cuenta de Instagram con más de 2 millones de seguidores, la actriz dejó diferentes videos de su podcast, donde explicaba cómo continuaba su estado de salud. Incluso, se permitía mostrar todos los momentos de sus tratamientos. En las últimas horas, su perfil se llenó de mensajes de despedida y aliento para su familia.