El sacerdote católico, perteneciente al grupo de curas en Opción por los Pobres, fue detenido y liberado por las fuerzas de seguridad.
“Aeste no, porque es cura”, afirmaron varios testigos que dijeron un grupo de policías que estaban interviniendo en la represión contra los manifestantes que protestaban en las inmediaciones del Congreso. Agarrado y tirado en el suelo por un oficial, con una camiseta de Boca Juniors, el padre Paco Olivera, perteneciente al grupo de Curas en Opción por los Pobres, estaba siendo detenido.