jueves, 19 junio, 2025

Para un economista, bajar la inflación no alcanza si la economía sigue estancada

En diálogo con Canal E, el economista Néstor Scibona trazó un panorama de luces y sombras en la coyuntura económica argentina tras registrarse una baja en los precios mayoristas.

La deflación, ¿una buena señal?

En un país como la Argentina que estamos infectados de inflación, una baja de inflación, siempre bienvenida”, aseguró Scibona, al analizar el reciente dato de una deflación del 0,3% en el índice de precios mayoristas. Aunque consideró positivo el freno inflacionario, advirtió que debe ser persistente y parte de una estrategia más amplia que también impulse el crecimiento económico.

Según explicó, el dato actual se vincula con una moderación de expectativas cambiarias: “El 11 de abril se anunció el acuerdo con el FMI y el fin del cepo para personas físicas, y eso desinfló una expectativa de devaluación”. Esta estabilización del dólar ayudó a enfriar precios que habían subido por previsiones de turbulencia.

Estabilidad cambiaria y caída de precios importados

Durante mayo, el tipo de cambio oficial apenas varió: “A nivel minorista subió solo 0,5%”, detalló. Esto se tradujo directamente en la baja de algunos productos importados, como el acero, que cayó 4,1%. El fenómeno refleja, en parte, un menor dinamismo en sectores locales.

A pesar de ciertas señales positivas, Scibona alertó sobre un contexto fragmentado: “Hay sectores que han repuntado muchísimo, como bienes durables, pero el consumo masivo sigue muy deprimido”. En un país con un 40% de pobreza, los beneficios de la estabilidad no llegan de forma equitativa.

Crecimiento desigual y riesgos estructurales

Para el economista, la recuperación actual presenta grandes asimetrías. La inflación, aunque en descenso, no soluciona los problemas estructurales. “La Argentina hoy importa más de lo que exporta, y eso complica el frente externo”, advirtió.

También apuntó a políticas restrictivas que frenan la recomposición del poder adquisitivo: “El gobierno ha puesto un tope en las paritarias para homologar aumentos salariales”, lo que agrava la pérdida de poder de compra, especialmente en los sectores más vulnerables.

Déficit externo y la incógnita electoral

Consultado sobre el efecto de la deflación mayorista en la balanza de pagos, Scibona fue claro: “No habría que asustarse con la deflación de un mes, pero si se vuelve persistente, puede generar recesión”. El otro frente crítico es la cuenta externa, impactada por el turismo y el desequilibrio comercial.

En el primer trimestre del 2025, 6 millones de argentinos viajaron al exterior”, subrayó. Aunque parte de esos gastos se compensan cuando los viajeros pagan con dólares propios, la presión sobre las reservas continúa, en especial por las metas impuestas por el acuerdo con el FMI.

La situación, para Scibona, se mantendrá en tensa calma hasta las elecciones: “La carta ganadora del gobierno es la baja inflación, pero el interrogante sobre la política económica va a seguir abierto hasta octubre”.

Sin crecimiento, no hay salida

El economista mencionó que este año “la economía va a crecer, pero no se quiebra la tendencia de los últimos 10, 15 años”, donde los vaivenes no logran consolidar una mejora real del ingreso per cápita.

Y para finalizar, agregó: “La inflación es el impuesto que más afecta a los más pobres”, pero su sola reducción no basta.

Más Noticias

Noticias
Relacionadas

Día del Padre 2025: Por qué se celebra hoy en la Argentina?

El Día del Padre es uno de...

Nació la primera bebé operada dentro del útero materno en el Hospital Garrahan

Este pasado fin de semana, el domingo...

La prueba que confirmaría el mal momento entre Daniela Ballester y Daniel Osvaldo

La relación de Daniela Ballester...