Hoy en el Festival de Cine de San Sebastián es la noche de Víctor Erice. El director recibe el Premio Donostia tras su regreso a la gran pantalla 50 años después de su Concha de Oro por ‘El espíritu de la colmena’. Ahora con ‘Cerrar los ojos’ nos ofrece una conmovedora historia marcada por la identidad, la memoria y un reencuentro. El recibimiento en el Zinemaldia con una atronadora ovación ha sido suficiente para emocionar al director. Ni sus oscuras gafas han sido capaces de esconder un llanto que le ha costado contener por los incesantes aplausos. Pocas veces vemos a Víctor Erice en público pero su vínculo con el Festival de San Sebastián le ha vuelto a poner frente a las cámaras. Esas que hace 50 años eran testigos de su Concha de Oro por su opera prima ‘El espíritu de la Colmena’. Allí también estaba Ana Torrent, aunque entonces apenas tenía seis años. ‘Cerrar los ojos’ les reúne de nuevo. Es el cuarto largometraje del director. Un homenaje al cine y a sus poderes sanadores. Esta noche recibe el Premio Donostia. Cierra un ciclo que, pese a los rumores, él asegura que no es un final.
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