Para el profesor e historiador económico Pablo Gerchunoff, el presidente Javier Milei “se parece” a Carlos Pellegrini, el militar, abogado y periodista que comandó los destinos de Argentina durante apenas dos años a finales del siglo XIX, tras la renuncia al cargo de Miguel Ángel Juárez Celman.
“Se parece a Pellegrini. Es notable porque Pellegrini era un proteccionista dentro del arco liberal de la generación. Fue un piloto de tormentas, que son las palabras con las que se lo describe siempre. Tomó el gobierno en 1890, en medio de un caos, y en 1892 había superado el caos y la Argentina estaba estabilizada y en marcha”, comparó Gerchunoff durante una entrevista con la periodista Jésica Bossi en Radio Mitre.
El intelectual admitió, no obstante, que no encuentra personajes comparables a Milei, a excepción de Pellegrini. “Después tengo que irme a -digo yo, para divertirme un poco- a Cavallo. Menem, Cavallo. Como eso se dijo mucho, entonces prefiero decir 1890. Después de que Juárez Celman se fue, llegó Pellegrini y mandó parar, como hubieran dicho los cubanos”, explicó y consideró que el presidente argentino “está mostrándose como un político de fuste”.
Para Gerchunoff, que fue funcionario nacional durante las presidencias de Menem y de Alfonsín, el líder de La Libertad Avanza es un político “que logra sorprender a la sociedad positivamente y que cada vez que toma una iniciativa es una iniciativa que confirma esa cosa de liderazgo con sorpresa que que tuvo Menem, que tuvo Alfonsín en otros terrenos”. En ese sentido, admitió que tienen “un nivel que yo no esperaba”.
Gerchunoff también afirmó que ve similitudes entre Milei y Carlos Saúl Menem, y en esa comparación encuentra ventajas y desventajas. “La desventaja es que Menem tenía internacionalmente una autopista iluminada de ocho manos. Acababa de derrumbarse la experiencia del socialismo real y entonces él llega al gobierno. Un gobernador populista de provincia y dice ‘voy por acá, si el mundo va por acá yo voy por acá’. Y esa es la desventaja respecto de Menem porque el mundo de hoy es mucho más incierto”.
En ese sentido, el autor de El eslabón perdido fue más allá y opinó que “Milei es el regreso de la ilusión minera de los hombres de Mayo de 1810, que creían que tenían el Potosí y lo perdieron. Bueno, Milei ha venido a esto, Milei vino a recuperar el Potosí”, en referencia a la ciudad minera de la actual Bolivia, que en esa época era parte del Virreinato del Río de la Plata.
“Quiero decir, los hombres de Mayo pensaban en un balance territorial, un norte minero y un sur -provincia de Buenos Aires-, agrícola, aprovechando el puerto. Y lo perdieron. La revolución perdió el Potosí y desde entonces la Argentina vive eternamente, permanentemente, un sueño minero”, repasó y apuntó que con la explotación de Vaca Muerta y los yacimientos de litio, el país podría atravesar una “explosión productiva”.
“Menem tenía el sueño, en todo caso, pero no tenía la oportunidad de Vaca Muerta, el cobre, el litio, el oro. Milei puede sacar el gobierno de la Argentina, digamos, puede agregarle 50 mil millones a las exportaciones argentinas. Y esa explosión productiva tiene una consecuencia macroeconómica, porque quiere decir que la Argentina puede. Y yo creo que Milei lo tiene en mente y que el Gobierno lo tiene en mente”, arriesgó.
Por eso, para Gerchunoff, Argentina atraviesa en este momento un estado de ilusión. “Hay que salir a la calle y ver que crece la ilusión. A veces yo pienso la Argentina de hoy como un partido de fútbol entre dos equipos; el clásico de la Argentina, que es entre ‘esta película ya la vi’ versus ‘esta vez es diferente’. Y en realidad esta vez es diferente. En este momento está ganando el partido”.
No obstante, el profesor de la Universidad Di Tella y la UBA, advirtió que “para que esto se consolide tiene que ocurrir que sea una etapa de progreso material y social sostenido” y reconoció que no es “entusiasmo” la palabra que a él lo vincula con Milei.
“A mí no me gusta Milei, no es de mi familia cultural. Yo no sería amigo de Milei, no sería amigo de Karina, y sin embargo le doy una oportunidad”, comentó pero admitió que le sorprendió “la fuerte caída de la inflación”.
Gerchunoff describió al presidente de la Nación como “muy decidido en lo fiscalista” y comparó su gestión con la “experiencia peruana” pero “con una extraordinaria ventaja” para Milei que es que “no cerró el Congreso”, por lo que “Milei no es (el expresidente peruano Alberto) Fujimori”.
El historiador económico celebró que el presidente argentino no haya encarado por el camino de la dolarización, tal como había prometido en campaña electoral. “Hubiera salio muy mal”, dijo y destacó como “maravilloso políticamente” el dólar barato: “Para la clase media alta, viajes a Miami, para la clase media baja en motos y para la clase baja, alimentos baratos, todo abaratado. Yo creo que Argentina tiene dos unanimidades el dólar barato y Malvinas”.