A horas de la presentación del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y con una velocidad nunca vista desde la llegada de La Libertad Avanza al poder, la comisión Bicameral que aborda los DNU se reunirá para su tratamiento. El panorama es incierto y algunos de los protagonistas prometen que habrá «show» en la reunión convocada para este jueves a las 13.30.
El oficialismo está confiado en contar con los números para blindar el DNU en al menos una de las dos Cámaras. Es que la velocidad con la que convocó a la comisión Bicameral dictaminarlo no se condice con el accionar de los libertarios. Si hubo algo que caracterizó a este cuerpo de trabajo, desde que asumió Javier Milei, fueron las estrategias aplicadas para frenar los debates de los Decretos de Necesidad y Urgencia.
El presidente de la Bicameral, el libertario Juan Carlos Pagotto, aplicó hasta acá un criterio un tanto particular para ralentizar una comisión que, tal cual dicta la ley que la creó, tiene apenas 10 días hábiles para pronunciarse sobre los DNU. De no hacerlo, las Cámaras quedan habilitadas a tratarlos sin el requisito de los dos tercios que corre para cualquier proyecto de ley que sea llevado al recinto sin dictamen. La lógica de esta “laxitud” responde a la “urgencia” de los DNU.
El insólito criterio de Pagotto hizo que, en lugar de que los diputados y senadores se abocaran a tratar decretos recién ingresados y que se encontraran dentro del plazo de los 10 días hábiles, se reunían en comisión para expedirse sobre decretos dictados en la eran de las gestiones de Mauricio Macri o de Alberto Fernández que, en muchos casos, ya habían perdido vigencia.
Pese a estos antecedentes, que fueron fuertemente cuestionados por la oposición, fuentes del Senado dan por descontado que, en esta oportunidad, en la que el oficialismo convocó a la comisión por motu proprio, se priorizará el DNU del FMI y que no se seguirá el criterio “cronológico”. Al parecer, el Gobierno está confiado en que su DNU llegará a buen puerto (o al menos que no será rechazado por ambas Cámaras).
Panorama incierto
Si se pone la lupa en la bicameral de DNU, de los 16 miembros, se da por descontado que seis de ellos firmen en contra del decreto de Milei. Ellos son: Anabel Fernández Sagasti, Mariano Recalde, María Teresa González, Carolina Gailllard, Ramiro Gutiérrez y Vanesa Siley, todos de Unión por la Patria.
La gran duda es qué harán el diputado de Encuentro Federal Nicolás Massot, que no está en contra del acuerdo con el FMI, sino de que sea vía DNU. Por otro lado, habrá que seguir de cerca la postura que tome el exoficialista Francisco Paoltroni, quien todavía no definió qué hará frente al tema. Los vínculos entre el formoseño y los libertarios están totalmente rotos luego de que el senador cuestionara la candidatura de Ariel Lijo para la Corte Suprema. Sus críticas hacia el asesor presidencial Santiago Caputo le valieron la exclusión del bloque oficialista.
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Presidente cuente con el Congreso para respaldar toda negociación que robustezca la moneda y mejore las perspectivas de desarrollo. Eso sí; asegúrese que el acuerdo con el FMI venga acompañado de la ley de presupuesto que usted debe y que fortalecería cualquier entendimiento.
— Nicolás Massot (@Nicolas_Massot) March 2, 2025
Otro diputado que habrá que seguir muy de cerca es Oscar Zago, el exjefe del bloque LLA, que fue corrido tras la sanción de la Ley Bases. Tras una serie de cortocircuitos, el hoy jefe del bloque MID podría ser la sorpresa de la jornada. Fuentes allegadas al diputado aseguran que el porteño, de mínima, hará sufrir al Gobierno. “Habrá show”, anticipó una importante fuente.
En caso de que Zago, Massot y Paoltroni firmaran en contra, el primer dictamen que se trataría en los recintos de ambas cámaras sería el de rechazo. De no reunir los votos suficientes para su aprobación (mayoría simple) se pasaría a votar el de acompañamiento. Ahora bien, en caso de empate al momento de las firmas de los dictámenes, el oficialismo tendría la llave para desempatar, ya que el Presidente del cuerpo tendría doble firma.
Como fuere, vale recordar que todo DNU tiene fuerza de ley hasta tanto sea rechazado por ambas Cámaras. Hasta que eso no suceda, el aval para el acuerdo por celebrarse seguirá en pie.